Pues sí, esa soy yo, la soñadora de esta isla. De momento supongo que me parezco más a Tom Hanks en náufrago, pero en mi mar está lleno de cosas bonitas, que te alegran el espíritu.
Me encanta pasar un rato cerca del mar con un libro que me haga reflexionar sobre la vida, comer tortitas americanas para desayunar (acompañadas de nocilla 0%, por eso de compensar… :P), las papelerías y las velas que huelen bien (pero que huelen de verdad).
The dreamy island es la isla -que me he inventado :)- en la que desarrollar mi creatividad.